Algunas personas sienten verdadero pánico a hablar en público. Una circunstancia que dificulta sus relaciones sociales e incluso puede ser un obstáculo tanto para conseguir un puesto de trabajo, estropeándoles una entrevista, o como para progresar en su trayectoria profesional, fracasando a la hora de presentar algún informe o proyecto antes sus superiores y compañeros.