
Pablo Olano es el alma de Infinity Crop. Inventor, pintor, viajero y defensor del cuidado del medio-ambiente, este creativo que trabaja la innovación ha vivido en muchos sitios: Barcelona, Ibiza, Inglaterra, Alemania, América y Francia y, desde cada campamento base, ha viajado a otros lugares del mundo hasta llegar a Gandia donde trabaja en el desarrollo de una máquina para el auto-cultivo.