El viaje de la Cátedra de Innovación Campus de Gandia de la UPV por centros educativos innovadores de La Safor hace parada en el Centro de Formación Profesional La Safor de Beniarjó, que está en un enclave rural enfocado a que el alumno salga preparado para la vida laboral.
El viaje de la Cátedra de Innovación Campus de Gandia de la UPV por centros educativos innovadores de La Safor hace parada en el Centro de Formación Profesional La Safor de Beniarjó, que está en un enclave rural enfocado a que el alumnado salga preparado para la vida laboral.
El Centro de Formación Profesional La Safor, o «El Instituto de FP de Beniarjó», como lo conoce toda la comarca es un centro bien especial, de eso te das cuenta en cuanto pones un pie en él.
Pegado a la huerta, su edificio tiene una fachada que no presagia lo que hay detrás: un edificio a dos alturas en el que conviven las aulas y el campo con toda naturalidad, no en vano fue pensado como jardín de infancia de aquellos niños y niñas cuyas madres trabajaban en la recolección de la naranja.
Eso fue a mediados de los 60 y ya siempre ha estado dedicado a la educación, aunque hasta 1974 no fue un centro de formación profesional como lo conocemos hoy.
Así es como lo define el propio personal:
Nuestro centro destaca principalmente por ser rural, acogedor y muy familiar, lo que nos permite dar un trato personal e individualizado, característica que nos diferencia del resto de organizaciones.
Lo dicen ellas y la verdad es que es lo que se respira allí: un instituto pequeño en el que todos se conocen y en el que trabajan para conseguir cuatro objetivos fundamentales.
- Formar personas con pensamiento crítico que se involucren en la sociedad, responsables y respetuosos tanto con los demás como con el medio ambiente.
- Orientar a los estudiantes para que se integren en el mundo laboral en Europa.
- Desarrollar las competencias digitales, sociales y lingüísticas que requiere la vida profesional europea.
- Promover el aprendizaje de idiomas y ser conscientes de la diversidad lingüística para contribuir a la multiculturalidad y tolerancia entre civilizaciones.
Precisamente estos cuatro propósitos son los que les mueven a avanzar en el terreno de la innovación educativa.
Para dar lo mejor a sus alumnos cada curso se exigen más como institución, vamos a ver cómo.
Principales proyectos que acreditan que son un centro innovador
Con la idea de preparar a los alumnos para su vida profesional sus metodologías se basan, principalmente, en el uso de recursos prácticos y colaborativos. Nada de clases magistrales en las que el profesor habla y el alumno escucha en silencio.
Nos comentan que lo que buscan es que el alumnado participe, experimente y aprenda.
¿Cómo? Pues aterrizando los objetivos en acciones concretas como estas:
🟠 Talleres colaborativos para fomentar el pensamiento crítico
Tal y como decíamos más arriba, el primer objetivo del «FP de Beniarjó» es formar personas comprometidas y que piensen por sí mismas. Par lograrlo, ponen en práctica talleres que tocan todas las áreas; estos son algunos:
- Taller de convivencia
- Taller de derechos humanos
- Taller de igualdad de género
- Taller de autoestima
- Taller de mediación
- Taller de primeros auxilios
Y hay más: algunos de ellos son desarrollados mezclando alumnos de unos ciclos con otros.
En este cometido no están solos, sino que cuentan con la colaboración de la ONG Centre de Desenvolupament Rural de La Safor, que está ubicada en el mismo edificio y que incluye en su programa la realización de estos talleres y otros como el de caricias positivas, actividades medioambientales y atención psicopedagógica.
🟠 Metodologías cooperativas adaptadas a cada ciclo
Como buen centro de formación profesional, tienen puesta la atención en la integración profesional del alumnado en todo lo que hacen.
Y claro está, cada especialidad requiere sus destrezas: no es lo mismo prepararse para ser educadora o educador infantil, trabajar en paisajismo o en el departamento de administración de una empresa.
Por eso adaptan la gestión de las capacidades según el ciclo, para que salgan lo más preparados posible.
Estas son algunas de las actividades colaborativas que llevan a cabo en cada ciclo para que los estudiantes saquen el máximo provecho a su paso por el instituto, atrás quedó aquello de aprender teoría:
Actividades colaborativas del Grado Superior de Educación Infantil
La idea de todas las acciones que llevan a cabo es que el alumnado pueda experimentar lo que va a encontrarse cuando se incorpore a un puesto de trabajo. ¿Cómo? Con la práctica, que es como mejor se aprende.
Para conseguirlo disponen las aulas y el trabajo en grupos tal y como se hace en las escuelas infantiles, organizan talleres para otros centros y llevan a cabo sesiones de cuentacuentos para ir practicando.
Actividades colaborativas del Grado Medio de Gestión Administrativa
En este grado, dedicado a la gestión de una administración, el trabajo de oficina como en una empresa real es imprescindible, por eso se trabaja tanto la organización como las tareas propias de un puesto administrativo.
Y como no hay nada mejor que hacer las cosas de verdad para aprender, ellos gestionan el servicio de copistería y encuadernación del centro.
Actividades colaborativas del Grado Medio de Preimpresión Digital
Si hay un grado enfocado al mundo laboral es el de Preimpresión Digital.
Este programa prepara al alumnado para puestos donde trasladar lo digital a papel es su principal actividad, como es el caso de las imprentas, agencias de publicidad, copisterías o agencias de diseño web.
Para llevarlo a cabo aprenden las técnicas y secretos del tratamiento de textos e imágenes para acoplarlos al formato que se requiera en cada momento, lo que implica el dominio de herramientas de maquetación e ilustración vectorial.
Y mientras aprenden la teoría, ponen en práctica los conocimientos adquiridos diseñando, maquetando e imprimiendo La Taqueta, la revista escolar del centro, y haciéndose responsables de la cartelería y material gráfico del instituto.
De esta manera colaborativa prestan un servicio al centro y aprenden a la vez.
Actividades colaborativas del Grado Medio de Jardinería y Floristería
Fundamentos de agronomía, equipos de tracción, implantación de jardines y zonas verdes, cultivo en viveros, composiciones florales y hasta técnicas de venta son algunas de las áreas que se trabajan en este grado enfocado al trabajo en floristerías, jardines, parques y huertos.
La verdad es que estos estudios están en un lugar inmejorable para practicar y convierten el centro y el entorno rural en el que está integrado en su campo de prácticas.
Da gusto pasear por su jardín, huerto e invernadero para comprobar cómo aplican lo aprendido.
Además de las experiencias en sus propias instalaciones, también asesoran a otros centros sobre temas agrícolas y acerca de la construcción de huertos escolares.
Y para rematar la inmersión en el área, colaboran en los trabajos de jardinería de Beniarjó y otras poblaciones de la comarca.
FP Básica de Agrojardinería y Composiciones Florales
Aquí la FP Básica de Agrojardinería y composiciones florales no se entiende como un paso intermedio hacia ciclos medios ni como un parche en la orientación de un estudiante.
En el CFP La Safor este grado es abordado como una profesión, precisamente eso es lo que hace innovador al centro: la formación va de jugar un papel importante en la sociedad como individuo.
Por eso, además de las clases en las que se aprende sobre áreas como los métodos de cultivo, los materiales y las técnicas de floristería y mantenimiento de parques y jardines, se lleva a cabo la elaboración de centros florales para las festividades del año.
Por ejemplo, en Todos los Santos, San Valentín o el Día de la Madre, los ramos y composiciones florales corren a cargo de los alumnos de este grado.
🟠 Iniciativas para la internacionalización del centro
En línea con dos de los objetivos principales que nombrábamos al inicio, el CFP La Safor ofrece a sus estudiantes la oportunidad de participar en proyectos europeos como son los Erasmus + y las becas FCT Europa.
Gracias a estos programas, el alumnado puede realizar una inmersión en otros países. De esta manera, no solo complementan su formación, sino que se les brinda la experiencia de interactuar con otras culturas y practicar idiomas.
🟠 «Serpis, escola i vida»: Proyecto de innovación educativa
La primera iniciativa en el área de proyectos de innovación educativa la han materializado en un programa de innovación con el río Serpis como centro de estudio.
La totalidad del alumnado del instituto ha participado en los tres ejes de este programa de investigación:
- La sensibilización, con visitas al río y jornadas de recogida de residuos.
- El compostaje casero, dirigido por los estudiantes del Grado de Jardinería.
- El tratamiento de la caña a través de un taller en el que se aprende a aprovechar las cañas, cuya proliferación puede causar problemas en caso de incendio o inundaciones.
Como en todo proyecto educativo innovador que se precie, el plan de trabajo se ha realizado de manera colaborativa y alejado de la rutina del aula por todos los miembros de la comunidad educativa.
Por ejemplo, los estudiantes de Preimpresión Digital han desarrollado infografías sobre las ventajas del compostaje y los de Gestión Administrativa se han encargado de la difusión por redes sociales.
En definitiva, abordar la materia de manera diferente, que es la esencia de la innovación en educación .
Y hasta aquí las principales acciones innovadoras del Centre de Formació Profesional La Safor.
Pero no podemos despedir este artículo sin mencionar un encuentro con empresas de la zona que se hace cada año como parte de su esfuerzo por integrar en el mundo laboral a los estudiantes.
Este instituto lo tiene claro: la colaboración entre las empresas y las instituciones educativas es esencial para conseguir ese objetivo. Por este motivo organizan esta reunión en la que organizaciones privadas y alumnado intercambian impresiones, ideas y propuestas que consigan que el futuro se vea más claro. ¿Qué es sino un centro dedicado a la formación profesional?
Atentos a la web de la Cátedra de Innovación Campus de Gandia de la UPV y a nuestras redes sociales para visitar el próximo centro ejemplo de innovación en educación en La Safor.
¡Nos vemos en clase!
PD. Gracias a: Jenifer Díaz y a Àngels Ciscar por su entusiasmo y dedicación.